Blog creado por neonatólogos y enfermeras de la Unidad de Neonatología del Hospital Universitario Príncipe de Asturias

martes, 5 de noviembre de 2019

¿CÓMO SABER SI TU BEBÉ ESTÁ COMIENDO LO SUFICIENTE?







Probablemente si le preguntásemos a las madres sobre aquello que más les preocupa, la mayoría responderían que su mayor preocupación es saber si su hijo está comiendo lo suficiente.
Esto que en el caso de la lactancia artificial puede resultar muy obvio (si le ofrezco la cantidad pautada por el pediatra y se toma el biberón entero, no hay duda), suele convertirse en un problema en los bebés alimentados mediante lactancia materna. En este post intentaremos explicar cuáles son esos signos que nos orientan sobre si el bebé está comiendo lo suficiente o si por el contrario es necesaria la valoración por parte de un profesional de la salud. En cualquier caso, si no te sientes segura, jamás dudes en consultar a tu pediatra/neonatólogo. Estos post en ningún caso pretenden sustituir una consulta médica.

1. Vigila las micciones de tu bebé.
Un bebé que está lactando debidamente mojará unos 6-8 pañales al día. Hablamos de bebés que han pasado sus primeras 24-48 horas de vida, en las que la micción puede ser más escasa, debido también a que el calostro, a pesar de ser muy nutritivo, tiene un volumen generalmente escaso. Las micciones además serán claras, y no se apreciarán a simple vista en el pañal. Una orina oscura y escasa puede significar que el bebé necesita más alimento. Del mismo modo, manchas rosadas o anaranjadas en el pañal pueden indicar que la orina está muy concentrada, y por tanto, que el bebé necesita más líquido, más leche en este caso.
2. Tras la toma, el bebé se queda tranquilo y duerme.
Cada bebé tiene un ritmo de sueño diferente, por ello no vamos a decirte que debe dormir 3 horas, ni 2, ni siquiera una hora seguida. Pero desde luego que un niño relajado y satisfecho, terminará la toma y dormirá durante un rato.
3. La curva de peso es ascendente.
Si bien tampoco podemos generalizar sobre cuánto peso debe ganar un bebé a la semana, porque la ganancia ponderal es algo individual de cada niño, la Asociación Española de Pediatría nos marca que la ganancia no debe ser inferior a 20g/día durante las primeras 6 semanas. Además, el peso del nacimiento debe haberse recuperado a los 15 días de vida.
4. Las deposiciones se vuelven color mostaza  
Por lo general, un bebé que se alimenta adecuadamente irá cambiando el color y la consistencia de sus deposiciones. Si bien al principio su color y consistencia se asemejan al alquitrán, con el paso de los días se volverán más verdosas para finalmente llegar a ser amarillas, color mostaza, y con "grumos". Aunque cada bebé tiene un patrón intestinal diferente, por lo general podremos decir que un bebé que entre el 5º y 7º día continúa haciendo deposiciones meconiales, es posible que no se esté nutriendo debidamente.


Además, hay otros signos más "subjetivos" de que el bebé está mamando bien.

- Le escuchas tragar mientras realiza la toma.
- Notas tus pechos más fláccidos cuando el bebé termina de mamar.
- Notas "contracciones" uterinas (hablamos de los primeros días) cuando pones a tu bebé al pecho.
- Al comenzar la toma, las succiones del bebé son cortas y rápidas, y al cabo de unos segundos se vuelven más lentas y profundas. Esto suele ser un síntoma de que la eyección láctea ha comenzado, y el bebé succiona de manera más prolongada para conseguir más leche en cada succión.
Hablamos de que son signos subjetivos porque no todas las madres sienten contracciones, ni flaccidez en los pechos, y no todos los bebés hacen ruido al tragar la leche. Pero en la mayoría de los casos así ocurre.

Quizás dar de mamar siendo observado por un profesional experto en el tema pueda ayudarte. Tu pediatra, matrona o enfermera del centro de salud son profesionales capaces de valorar si una toma está siendo bien realizada, o si el agarre y postura son correctos, permitiéndose así un buen drenaje de leche. Quizás tu bebé necesite tomas más frecuentes, que alguien te enseñe algún "truquito" para despertarle (sí, existen esos bebés llamados con acierto "bellos durmientes")...

Si dudas sobre si tu bebé está recibiendo una cantidad adecuada de leche materna, consulta con tu pediatra. 

Si finalmente tu bebé necesita un suplemento, se procurará siempre que sea tu propia leche extraída la que se le ofrezca tras el pecho. Pero si por cualquier razón no fuese suficiente y hubiese que suplementarle con leche artificial, no te preocupes. Conocemos los beneficios de la leche materna y siempre la recomendamos como primera opción, pero también sabemos que no siempre es posible. Por suerte, las fórmulas artificiales hoy en día están a nuestro alcance y son de absoluta confianza. Ofrecer al bebé una fórmula artificial es una opción igualmente válida, que no debe ser motivo de frustración ni disgusto. Desde @nacerenalcala estamos seguros de que las madres que optan por la lactancia materna hacen todo lo posible para conseguir que el pecho sea el único alimento de sus hijos, pero también debemos decir que nuestra experiencia y nuestro trabajo diario nos han enseñado que a veces no es posible, y aquí estamos para animaros y apoyaros en estas posibles dificultades.

¡Sea cual sea la alimentación de tu hijo/a , sabemos que serás una gran madre!¡Ánimo!